Creo en el diseño como vehículo de transformación y mejora del mundo. Para mí es una herramienta que resuelve los problemas que se presentan en la vida cotidiana. Sin embargo, hasta ahora este efecto se ha producido sobre todo en las ciudades. A través de mi experiencia y mi capacidad, busco que el diseño se convierta en un factor importante del desarrollo rural y no sea exclusivo de las zonas urbanas. Mi meta es trabajar para hacer posible el progreso del entorno en el que he crecido y en el que vivo.